24.5.11

Tú, que pudiste ser cualquiera,
que invadiste con tu boca mi rutina,
que usaste tu cuerpo en mi frontera,
como cabeza de playa clandestina.

Tú, que llenaste mi pelo de ceniza,
que sofocaste el fuego con tu risa,
que me inundaste de arenas movedizas,
que maniobraste sin pudor por mi cornisa.

Tú, que empujaste el Mundo al infortunio,
que rompiste el tímpano del miedo,
que atrapaste el sol en su solsticio,
que inflamaste la cúpula del trueno.

Tú, siempre tú...aunque pudiste ser cualquiera,
elegiste ser mi bandera, mi estandarte, mi tótem, mi lingote, mi moneda, mi corona, mi copa, mi guirnalda, mi medalla, mi promesa más certera.

Mi Tú...

No hay comentarios:

Publicar un comentario