11.4.10

I want my town back...

Jose L Santisbon

...Por vez primera en estos 4 años que tengo fuera de mi ciudad natal he sentido la angustia de un naufrago a la deriva de la marejada; esta ultima visita ha sido la mas amarga y triste de todas. Para empezar nunca he dejado de sentir que mi casa esta en Tampico, sin menospreciar las bondades que he recibido al vivir en el bendito y a la vez maldito DF.

En estas vacaciones de semana santa sucedió lo impensable; a los pocos días de estar en mi lugar focal, ya tenía ganas de regresar a casa. El terror, el miedo, la oscuridad y la zozobra, se han apoderado de la ciudad que también he escogido como punto final.

Llegaron hace 3 años, florecieron al amparo de la podredumbre y a expensas de la gente se atragantaron robando los sueños y la tranquilidad de un pueblo tan humilde de espíritu y sin pretensiones. Nuestra mayor riqueza era la paz, misma que en su búsqueda nos ha hecho aceptar por igual feudalismos comunistas, caudillismos mesiánicos y liderazgos miserables (por no decir díscolos).

Quien levantaba la cabeza tras la huella de un exito merecido, era capado sin remedio, sin pudor y sin tregua. Desde un simple empresario hasta un exitoso taxista, la forzada cuota para seguir con vida era impuesta por decreto.

La autoridad de ambos niveles de gobierno, adornaba mas patéticamente el panorama que las figuras clásicas de los changuitos que no ven, no escuchan y no huelen (si hablaban, pero para paliar responsabilidades en otros).

"¿Y donde huir cuando no quedan, islas para naufragar...?" -Joaquin Sabina-

Y reparafraseandolo: " Perdon por la tristeza"...y perdón por metaparafrasear.