21.9.10

Canción de cuna

Con el favor de los cielos,
sólo pido un dulce sueño,
y que me arrulle por siempre,
el ritmo que hay en su seno.

Que sea por siempre la calma,
que duren mucho sus besos,
y permanezca latente,
la gran quietud del silencio.

Que me entretengan sus risas,
que dure más que un recuerdo,
y al terminar cada día,
siempre comience de nuevo.

Con el favor de los cielos,
sólo pido, su dulce sueño.

JLS, con mucho cariño en la noche de un día después

11.9.10

AIRE

Desde hace tiempo lo vengo sintiendo, desde hace tiempo estoy convencido, desde hace tiempo vengo padeciendo y creo que sin un claro motivo, la duda consume la poca presión que me regala esta placenta donde vivo…atmósfera, le dicen. Después de una eternidad, cobré consciencia y me puse a espiar cada una de mis dimensiones, de mis extensiones, de mis dominios; después de no sé cuánto tiempo, se apareció la criatura más espléndida de toda la inmensidad que poseo; bella, de risa ligera, de aroma sutil, de piel erizada, de mirada perfecta, de humedad bendita, de suavidad delicada, de tersura perturbada.

Y reconocí el porqué de muchas tonterías que suelen hacer los hombres, la razón de sus incongruencias, la estridencia de sus propias sinfonías. Pero yo no puedo darme ciertos lujos, estoy, y voy, y juego, y abarco, e inundo, y regalo, y me transformo fluídicamente; pero no puedo materializarme y concentrarme en moléculas más pesadas. Y no la puedo tocar, sólo imaginarme; no necesito volar pues soy el vuelo mismo, pero jamás podré sentir sus besos.


Y ella me corresponde, se vuelve feliz cuando me disfruta, cuando le desacomodo el pelo, cuando nos encontramos a la orilla del mar, ó en la cima de una colina, ó en la noche que la envuelve, donde puedo protegerla. Me tiene siempre, aunque no me lo pida, soy suyo aunque me comparta con el resto de la humanidad; estoy a su servicio aunque casi nunca diga mi nombre. Consuelo estúpido, el saber que sin mí se muere, aunque ella no se dé cuenta; que sí un día deja de meterme dentro de ella, sus pulmones se colapsarían provocándole una muerte sumamente dolorosa y angustiante.


¿De qué me sirve ser el elemento más vital de todos? Cómo sea no puedo tenerla, sólo puedo cubrirla, sólo puedo darle vida…aunque ella nunca me piense. El amor platónico ó romántico, son parte de la misma desgracia, pero es lo único que me queda.


JLS, en estado gaseoso y sin condensarme

7.9.10

¡Geek!

Ya hasta me compré un “Smartphone”, para estar conectado todo el tiempo. Para poder convertirme en una celebridad, en un divo del tuiter, estoy seguro que con mi ingenio y carisma podré demostrarles lo valioso que soy… ¿Por qué todavía no se han dado cuenta? ¿No les gustó mi nuevo avatar? ¿Habrá que inventar una “Bio” más atractiva? No, no lo creo…todo es cuestión de tiempo. De tiempo y presencia; es fácil la dinámica, darle “reply” a todos los tuits que vea, retuitear lo que valga la pena, complementar datos, pegar “links”, volverme un foco de atención. Tuitear 24horas/7días de la semana.



Por supuesto que tengo que pelearme con los “grandes”, con los “artistitas” tuiteros que sólo buscan más adulaciones…no me importa que me bloqueen, al contrario, darme el gusto de hacerlos rabiar. No me preocupan los posibles trolls que me pueda ganar, ¡Que vá!, son parte del “business”. Tengo que multiplicar por 20 mi número de seguidores, aunque tenga que seguir al mísmisimo diablo, jajajaja, ¡ojalá tuviera cuenta! Ya me cansé de ser ignorado, ya me harté de que nadie me salude, quiero ser alguien…tengo que ser alguien. Ya me compré el nuevo gadget del momento, ya puedo ir a cualquier lugar a tomarme un café, y abrir mi internet, y conectarme, y ser feliz.


¡Qué mañana tan lluviosa! Mejor me pongo música y los audífonos para no oír tanto claxonazo…sí, a todo volumen. Y mientras camino me pongo a tuitearlo todo, que vean que sólo vivo para esta “red social”. ¡Wow! ya despertó ese bombón que tanto me encanta, voy a mandarle su saludo matutino; ya voy progresando, me tardé varios meses, pero ya me sigue…después de todo no fue tan difícil, la encontré en un momento vulnerable, un momento “emo” y sólo le dije lo que quería escuchar; ¡Total! ¿Quién me conoce en la vida real? Puedo exagerar, puedo mentir, puedo tirar mis dardos…el chiste está en la forma y no en el fondo, en cómo vistes lo que dices; y sí lo dices mal, rápido cambiar de tema ó meterte en una discusión bizarra; es muy sencillo “marear” al Time Line.


¡Órale! ¡Qué buena canción! Hace mucho que no la escuchaba…hasta podría cerrar los ojos e imaginarme… ¡No! Mejor la tuiteo… ¿Qué es esto? ¡Auch! ¡Cómo duele mi rodilla! ¿Y éste vértigo hacia mi lado izquierdo? Me caigo, ¡No! Estoy girando, eso es el cielo; ¡Mi cara! ¡Eso duele mucho! Sigo girando, siento algo caliente derramándose sobre mi sien y mejilla, ¡Mi cuello! ¿Qué es esto, una llanta? Siento, siento…siento raro, de hecho ya no siento… ¡Qué luz tan fuerte! ¿Estoy arriba del árbol? ¡Carajo! ¿Qué me pasó? ¿Ese soy yo? ¿Quién es ese que agarra mi teléfono? ¡Déjalo! ¡No es tuyo!... ni se te ocurra ver lo que estaba tuiteando, mmm ¡No escribas nada! ¡No es tu cuenta!... ¿Por qué me tomas una foto con mi teléfono? ¡Quiero ver!... ¡Ah! también habilitaste la opción de “GeoTagging”, así sabrán donde estoy; mejor dicho, donde estuve por última vez; pero, ¿qué será lo que puso?, ¿cómo saber? Voy a estirarme, ¡Ay, Dios! Me puedo desplazar, estoy flotando, ¡Órale! ¡Qué sensación!... ¿Dónde quedó mi aparato?... ¡Ahí está!... ¿qué dice?... ¡Sí! ¡Por fin!...ya soy un #TrendingTopic


JLS, aprendiz de Geek

3.9.10

Dilo en #Haiku

En vida, siempre
prefiero escucharlo
dilo ahora.

Cuando me muera
no lo escucharé mas
dilo ahora.

Antes de todo
y de arrepentirte
dilo ahora.

Dilo ahora
y dilo para siempre
dilo ahora.

JLS, en modo Haikú (http://es.wikipedia.org/wiki/Haiku)

2.9.10

Mi Homenaje a Don Germán Dehesa (QEPD)

Esta fué su última columna en el Reforma...

El corazón y sus figuraciones

Germán Dehesa
25 Ago. 10

Creo que no les he contado que estoy enfermo, seriamente enfermo. Tengo cáncer, pero hasta ahora la enfermedad no me ha producido ningún dolor insoportable.

Trato de vivir sobre las puntitas de los pies, pues en mis delirios, imagino que si casi no hago ruido, la enfermedad no se va a percatar de mi presencia y me permita colarme a la vida que es a donde me gusta estar. Como quien dice, mi vida es casi secreta y su único nuevo rasgo que yo detecto es la impaciencia. Así pues, no tiene ningún sentido que me saluden de lejecitos, ni que me saquen la vuelta, ni ninguna patochada de ésas. Nadie tiene idea de cuándo será la terminación cronológica de mi vida, pero calcula la ciencia médica que esto ocurrirá hacia los finales de este año. Espero distribuir generosamente entre el personal médico billetes de muy alta denominación, de modo que este plazo se vaya ampliando, por lo menos, hasta 2020. Si se puede obtener más, ahi lo dejo en manos del gobierno. Tengo mucha confianza en que nuestra burocracia acuse recibo de la solicitud en 2018, lo cual nos da margen para seguir resollando. Lo que desde ahora les puedo asegurar es que, mientras pueda yo menear la pluma y no comience a decir puros despropósitos y marihuanadas, aquí me tendrán siempre a sus canijas órdenes y a sus pies, si no les rugen, como solía decir la inmortal Borola Tacuche de Burrón.

Me molesta casi tanto como a ustedes, este tipo de artículos donde tengo que ponerle luto a mis palabras y no sacarlas a pasear para que se asoleen que es lo que a mí más me gusta; pero dibodobadito, tarde o temprano los médicos logran llevarte a sus terrenos y ahí es la de no te entumas y no le saques, manito. Por esas latitudes transito yo en la actualidad. Me entusiasma saber que, gracias al talento de sus madres, mis hijos son gente de bien, con buena orientación en la vida y totalmente a la guapachosa altura de su herencia veracruzana. Todos son estudiosos, trabajadores y con magnífica inteligencia que, donde primero y mejor se muestra es en el buen humor que los cuatro manifiestan, caiga quien caiga.

No me estoy despidiendo. Yo espero que falte mucho como para que ocurra algo tan ingrato. Como en el teatro, esto es apenas la primera llamada, primera. Ya sé cómo se las gastan los lectores de por aquí y no me sorprendería que, a la vuelta de unos días, me tope con gente que diga que, el mero día del Bicentenario me voy a suicidar en el Zócalo gritando leperadas en contra de un gobierno y de un sistema que premia cada vez más a la idiotez y no suele ser justo con la inteligencia. No, yo no voy a hacer nada de eso para celebrar o denostar a este sistema del que, por lo demás soy miembro activo y no quiero jamás dar la impresión de que me doy de baja. Lo que sin duda ocurrirá es que el sistema me dé de baja a mí, pero ése ya es otro cantar.

Voy terminando. Este artículo y sólo este artículo. Yo tengo que guardar reposo por algunos días, pero muy pronto volveré a vestir mi uniforme azul y oro y a sembrar el pánico por todas las canchas de la República. Ahí me los encontraré. Mañana nos vemos. ¿Entendido?.

¿QUÉ TAL DURMIÓ? MDCCCLXXVII (1877)
¿Alguien ha visto a MONTIEL?. Cuando lo pierdo de vista, me viene como el soroche.


Cualquier correspondencia con esta columna llena de figuraciones, favor de dirigirla a dehesagerman@gmail.com (D.R.)